Entre todos debemos decidir y mejorar las cuestiones de seguridad náutica
El Secretario General Jorge Frías fue entrevistado esta mañana en la 99.9 de Mar del Plata. Consultado acerca del reclamo que aún mantienen familiares de las víctimas del hundimiento del pesquero Repunte dijo: "Como náufrago sobreviviente, con un hermano muerto en ese naufragio, entiendo sobradamente el sentimiento de los familiares". Asimismo insta a todos los partícipes a trabajar conjuntamente para prevenir que sigan ocurriendo tragedias como estas, producto de desidia, desinteligencias, desinterés, y obviamente de corrupción, y reclama: "Si vamos a tener que dar respuesta por futuros hechos que no deseamos, queremos participar en las normativas".
Audio del Secretario General de la Asociación, Cap. Jorge Frías en la entrevista realizada por el periodista José Luis Jacobo en su programa Noticias y Protagonistas, FM 99.9 Mar del Plata.
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Los testimonios de los dos sobrevivientes del hundimiento del b/p Repunte
coinciden en que toda la tripulación había logrado subir a la balsa salvavidas,
y los reclamos de los familiares continúan. Así introduce el periodista en la
conversación al Secretario General de Capitanes de Pesca. "Que la
historia no olvide esta lucha que hoy tienen las familias del Repunte, que la
mía la tuvo en octubre 1989, cuando me tocó vivir el naufragio donde perdió la
vida mi hermano, donde también se había dado la 'fiebre por el oro rojo' por el
langostino, y en aquel entonces pasaban cosas similares (...) repentinamente
todos los barcos se empezaron a transformar en congeladores, yo
estaba en un fresquero que en menos de seis meses pasó a ser
congelador", señala Jorge
Frías.
"Desde aquel entonces mi padre vivió una peripecia en busca de
encontrar soluciones para estos desatinos enredados entre la desidia el
desinterés y la corrupción. Mi padre en aquel entonces hizo notas, se reunió con
diputados, con senadores, para tratar de dar un cambio, mirando para adelante
para que no volviera a pasar. Mi padre nunca pudo recuperarse de esa pérdida,
por eso se dedicó en los dos últimos años de su vida a tratar de encontrar una
solución y respuestas para que esto no siga pasando", recuerda y añade
que eso lo llevó, junto con integrantes de la Comisión Directiva de la
Asociación, a unirse a la búsqueda de los tripulantes desaparecidos, posibles
sobrevivientes o el encuentro de los cuerpos que pudieran haber alcanzado la
costa, y llevarle esa esperanza a un compañero el capitán Eduardo Samite que
perdió a su hijo, y una cosa es saber que se perdió un hijo y otra que puede
estar en algún lugar, nuestro objetivo era agotar la alternativa de que
estuviera en tierra, reducir la
incertidumbre.
"Esto es producto de desidia, de desinteligencias, de desinterés,
y obviamente de corrupción política, corrupción empresaria y corrupción de todos
los sectores involucrados, aunque más no sea por el sólo hecho de no decir. No
me puedo permitir desde el lugar que ocupo no decir lo que debo, y lo hago con
la responsabilidad que me compete y con los costos que puedo tener por lo
mismo", afirma y prueba las denuncias impulsadas públicamente por los
salarios que se pagan en negro, principalmente en el Puerto de Mar del Plata; y
sobre expresiones de Prefectura Naval Argentina, como en 2006 desde la
Asociación se hicieron presentaciones formales referidas al recorrido de las
balsas salvavidas, ofreciendo que un representante gremial participe de esa
tarea, que consiste en verificar que la propia balsa y los elementos de
supervivencia que contiene estén en perfectas condiciones. Sobre esto último
recuerda que aquel fatídico día de octubre de 1989, "la balsa del
pesquero 'Sheriff 1º' no estaba en condiciones pero contaba con todos los sellos
y la certificación de la empresa Nautiq, que hoy está instalada en el corazón
del puerto, que ha crecido sobre la muerte de mi hermano y del capitán, con la
anuencia no de Prefectura sino de prefecturianos, que son hombres que asumen
responsabilidades que en algunos casos no se
cumplen".
Respecto del reciente comunicado emitido por Prefectura tras el
hundimiento del Repunte, Frías afirma que la PNA "hace como Poncio
Pilatos en querer lavarse las manos de una responsabilidad que también tiene, no
puede deslindar absolutamente la responsabilidad sobre un capitán, un conductor
de máquinas o un marinero. Esto es no hacerse cargo de lo que le compete a cada
uno".
Se debe trabajar en conjunto, por eso desde la Asociación de Capitanes se
viene invitando a la cogestión: Prefectura, autoridades de contralor, empresas,
gremios marítimos, para que todos juntos podamos mejorar las normativas que se
aplican sobre la seguridad náutica. Lo que implementa la Prefectura, y tras lo
cual se escuda, es con la simpleza de decir que cumplen con las normas
establecidas.
Como idóneos sostenemos que debe reverse la normativa vigente, que en
casos atenta contra la seguridad náutica. Cuando dije que no es casual que
el 'Repunte' se hundiera después de navegar por más de 40 años, justamente
cuando le adicionan un dispositivo externo como los tangones es una cuestión a
analizar, no es sólo instalar un tangón sino ver todo lo que implica a
seguridad náutica, porque se modifica la situación física del buque. Es posible
que en ese caso la balsa salvavidas tuviera que tener otro lugar, hay buques que
cuando los tangones se pliegan obstruyen la puerta de la timonera. Y sobre esto
último padecemos otra aberración de la normativa, que fuerza a plegar los
tangones cuando se navega en zona de veda que en muchas ocasiones
pone al buque en situación
riesgosa.
Sin ánimos de buscar responsables o culpables, "queremos mirar
para adelante, queremos la cogestión. Si vamos a
tener que dar respuesta por futuros hechos que no deseamos, queremos ser parte
de las decisiones que se toman, y quizás las normativas internacionales sean de
carácter mínimo y Argentina tiene el derecho de mejorarlas, y esto es lo
que queremos discutir, por ejemplo por qué un buque tiene que ir con una sola
balsa, ¿porque es un costo económico? entonces tenemos que discutir cuál es el
verdadero costo de una balsa, cómo podemos instalar que haya dos balsas, quién
debe afrontar el costo, y no nos cerremos a que por una cuestión de costos se
sigan perdiendo
vidas.
